Curso de Pádel Gratuito
Descarga la App y conviértete en un Pro

Dolor Muscular y Cutáneo – Diferencias y Tratamiento

  Padel Home   Mar 22, 2015   Lesiones en Pádel   0 Comentarios

Dolor Muscular y Cutáneo – Diferencias y Tratamiento. El dolor muscular es el principal motivo de consulta, ya que los músculos tienen un gran número de terminales nociceptoras libres (fibras nerviosas que detectan el dolor) que son capaces de generar mucho dolor.

Dolor Muscular y Cutáneo - Diferencias y Tratamiento

Foto: Aranfarmacia

Dolor Muscular y Cutáneo – Diferencias y Tratamiento

El sistema muscular es el más grande del cuerpo, llegando a alcanzar un 60% de su totalidad. Las lesiones en un deporte como el pádel suelen ser en un gran porcentaje, musculares (te puede interesar conocer Las lesiones más frecuentes en el pádel).

El dolor cutáneo se localiza fácilmente, es más fácil de tolerar, y se define como punzante, cortante, con ardor… Y no produce dolor referido.

En cambio, el dolor muscular se caracteriza por ser poco localizable, es más intenso y se asocia a calambre, hormigueo, desgarro, presión… Es un dolor profundo que puede producir dolor referido (se extiende hacia algún área concreta para cada músculo). Se relaciona con causas afectivas (estrés psicológico) que potencian a su vez la capacidad de producir dolor. Es un círculo

Los nociceptores musculares (captan el estímulo doloroso e informan al sistema nervioso central) al activarse producen un espasmo doloroso, sordo y persistente. Además se activan determinadas estructuras corticales pudiendo producirse alteraciones en el control motor. Por tanto, un dolor muscular en el pádel podría causarnos un peor control en las jugadas.

En concreto, si comenzamos a tener dolor lumbar hay estudios que demuestran que en las lumbalgias existe un retraso en la activación de la musculatura profunda de la columna (que es la que la protege de lesiones al mantenerla en una buena posición). Por tanto, a la hora de golpear la pelota nuestros músculos profundos no actuarían lo suficientemente rápido de forma que ya habríamos comenzado a golpearla cuando se activasen exponiendo la columna a más riesgo.

Afortunadamente se pueden reentrenar y se ha demostrado que aprendiendo a activar el transverso del abdomen, los multífidos y la musculatura del suelo pélvico e irlo introduciendo en nuestras actividades disminuye el dolor lumbar.

Otra buena noticia es que las vías descendentes moduladoras del dolor inhiben el dolor muscular con más potencia. Por tanto, el ejercicio que se tolere sin producir dolor ayudará ir disminuyéndolo. Otra forma de estimular a nuestro sistema nervioso a que produzca analgesia es mediante tratamientos como la punción seca o la terapia manual.

Tipos de mialgias

Dolorimiento muscular. Es una lesión por elongación muscular (tipo I) pudiendo causarse por un movimiento brusco o ejercicio excéntrico (el músculo está en contracción y se estira alejando origen de inserción)
En este caso no hay lesión importante y no debemos preocuparnos ya que tras 24 horas se resuelve de forma espontánea.

DOMS (Dolor muscular de aparición tardía). Son las clásicas agujetas y se afecta a más fibras musculares que en el anterior. Se suelen mantener entre una semana y 10 días. Se trata de un dolorimiento, sensación de rigidez, dolor punzante y sensibilidad muscular.

Es una forma de crecimiento muscular ya que al romperse las bandas Z de las fibras musculares se regeneran nuevas sarcómeras. Disminuyen en un 22% nuestro rendimiento deportivo por fatiga al llegar demasiada información dolorosa al sistema nervioso central.

Las agujetas son beneficiosas si se interpretan como algo positivo y dentro de los márgenes de tolerancia de cada uno, dentro del aguante que tengamos. Son especialmente útiles en el dolor crónico (más de 3 meses) cuando las agujetas compiten con el dolor del paciente.

Ya escribimos de forma más concreta un artículo sobre los calambres musculares en el pádel.

Espasmo muscular: afecta a todo el músculo que se contrae. La solución consiste en estirar de forma controlada.

Contractura muscular o punto gatillo miofascial: es un acortamiento de una parte del músculo o se ha definido clásicamente como “foco hiperirritable dentro de una banda tensa de un músculo esquelético, doloroso a la compresión y puede provocar un dolor referido característico, disfunción motora y fenómenos autonómicos”.

Las causas que los activan son directas (traumatismo, sobrecarga, frío…) o indirectas (alteraciones metabólicas como falta de hierro o magnesio o enfermedades como el hipotiroidismo, radiculopatía, hernia de disco…). Por tanto para prevenirlos podemos influir en las causas subyacentes.

En el pádel hay que tener en cuenta los puntos gatillo porque se usa mucho el miembro superior para los golpes de pala. La presencia de puntos gatillo latentes en los rotadores de la escápula altera el patrón de activación muscular durante la elevación del plano escapular y predispone a abusar de condiciones que incluyen el síndrome de compresión, la patología del manguito rotador y el dolor miofascial. Además previniendo los puntos gatillo evitamos peores jugadas y patologías a la larga.

Bibliografía

– Mense S. Muscle Pain: Mechanisms and Clinical Significance. Dtsch Artel Int 2008; 105(12): 214-9.
– Arendt-Nielsen, LA Graven-Nielsen, Th. Muscle Pain: Sensory Implications and Interaction With Motor Control. Clin J Pain Volume 24, Number 4, 2008: 291-298.

Si quiere conocer más sobre las lesiones y su tratamiento en el mundo del pádel, no te pierdas nuestra sección de:

Lesiones y Prevención en el Pádel

¿Qué te ha parecido el artículo sobre Dolor Muscular y Cutáneo – Diferencias y Tratamiento? ¿Tienes alguna duda sobre este tema? Si te ha gustado el artículo, puedes compartirlo en tus redes sociales. 

REDACTADO POR: Irene María de Diego Illescas – Fisioterapeuta

Los comentarios están cerrados.